Autores:
Dra. Ivette Torres Roig(ivette.torres5@upr.edu)
Dr. Jaime Abreu Ramos(jaime.abreu@upr.edu)
Los profesores de los cursos de Educación Cívica del décimo grado desarrollamos una iniciativa de solidaridad junto a los estudiantes de la Clase 2020. La razón para el desarrollo de esta iniciativa fue ofrecer experiencias de aprendizajes concretas que fomentaran las relaciones sociales positivas mediante el fortalecimiento de los espacios de solidaridad y la gestión social entre los miembros de nuestra comunidad de aprendizaje. A su vez, se brindó a nuestros estudiantes maestros un escenario para conocer los diversos contextos sociales que condicionan la enseñanza y la gestión escolar.
El proyecto que hoy compartimos con la comunidad de aprendizaje de la Escuela Secundaria representó un acto de solidaridad y autogestión en medio de la devastación y la crisis causada por el huracán María. Los estragos que dejó el huracán en la sociedad y en el país superan por mucho lo que se pueda cuantificar en pérdidas de infraestructura. Las complicaciones particulares para las familias de nuestra comunidad escolar comenzaron a sentirse luego del paso del huracán María. Esta iniciativa intentó mitigar el impacto directo para algunas de las familias de nuestra Clase y, al menos, de un estudiante de nuestro recinto quien realiza con nosotros su práctica docente y de un empleado del sector no docente de nuestra institución.
En una sesión de asamblea de la Clase 2020 se presentó esta iniciativa con el propósito de que los estudiantes del grado elaborarán sus propias propuestas de intervención y acción. Las ideas que se generaron en esta asamblea recibieron el apoyo total de los profesores y se procedió a viabilizarlas en las reuniones de grupos pequeños del curso Educación Cívica 1019, del año académico 2017-2018. Se solicitó la asistencia de la Oficina de Consejería como recurso para la identificación de las familias afectadas por el huracán María, precisamente por haber tenido a cargo la creación de un censo institucional de necesidades de las familias de la escuela. Los profesores del grado procedimos a discutir en sus méritos la situación de las familias más afectadas para decidir cuáles de ellas necesitaban ayuda de emergencia en cuanto a la alimentación y salubridad. Se recibió una asesoría de una exalumna nutricionista para crear la lista de víveres y se identificaron productos de limpieza necesarios de manera que cada grupo del curso donára de forma equitativa. Los estudiantes trajeron sus donativos a los salones de acopio y allí se procedió a reorganizar los donativos en bolsas que se entregarán a las cinco familias identificadas
Concluimos este memorando compartiendo una foto de la clase 2020 con los víveres distribuidos en fundas y organizados en las distintas categorías.